Siempre he escuchado que todo depende de la actitud que
asumas ante las situaciones que se presente, algunas pueden ser más difícil que
otras, pero está en ti saber sobrellevarla y manejar el momento.
Comienzo a
creer que es cierto, juzgando desde mis propias vivencias soy testimonio de que
mi vida no ha sido una jaula de oro precisamente, nunca lo he tenido todo, pero
de un tiempo acá me ha cobrado unas que otras facturas que tenía pendiente y
espero verla saldado y a la vez continuarla saldando.
De mi año 2016 en septiembre nuestro creador me envió unas
cuantas lecciones de vida para que pusiera en práctica lo aprendido
anteriormente y sin duda alguna ahora analizando re-confirmo que si, aprendí,
estoy aprendiendo y seguiré aprendiendo la lección. La actitud lo es todo, el saberse manejar en
los diferentes momentos, la respuesta en el momento preciso. Nada es tan grande
como aquel cerrar los ojos para siempre, exceptuando esto, todo tiene solución.
Soltar, dejarle algo de protagonismo al tiempo creo que es
la mejor respuesta para aprender a acentuar nuestra actitud y no dejarnos
engañar por pequeñeces sin sentido.
Comentarios
Publicar un comentario