A cada año de mi vida le pongo una denominación
Este año, es el año de la resiliencia.
Para nadie es un secreto que este año ha sido uno de esos años que me
han dado bien fuerte. Si existe un año en mi vida que lo denomine el año que más caída he tenido, que haya
estado más tiempo en el sótano pues sin duda alguna es mi querido 2018.
Y, aunque sólo estamos terminando de pasar el primer trimestre; cuantas
enseñanzas me han tocado.
Agradezco TODO ❣️en mi vida.
Agradezco los problemas, la soledad ⚡️, las lágrimas, el
frío ️, el cambio...
Aprendiendo a reír bajo la tormenta️, aunque a veces mis lagrimas se
escondan bajo la lluvia.
Extraño mi familia , mis amigas, mi clima ️más no mi país. 🇩🇴
Esta tormenta en mi vida pasará, son simplemente un párrafo más en mi
libro llamado: vida.
Me disfruto mi libertad ♀️, aunque siempre he trabajado ahora
valoro más el dinero.
Mis valores siguen intactos e inamovibles.
La comunicación con mi familia es totalmente fluida, hemos
aprendido a decirnos más seguido esos bellos ️TE AMO ️y con mis
mejores amigas y amigos.
Las personas se sientan conmigo y me cuentan toda su vida, al inicio me
sentía incómoda pero ya he aprendido tanto de ellos. Son enseñanzas para mí de
aquello que no quiero en mi vida.
El lenguaje corporal y la educación van de la mano. Todo aquello que
transmite con tu cuerpo, habla tanto de ti.
Agradezco a Dios que aún en otro país 🇱🇷, estoy en un
centro geriátrico🧓🏻 de voluntaria para
ayudar aquellos adultos mayores.
Que ya mis clientes me conocen, que estoy creando mi marca personal
en un destino desconocido.
Vamos a ver lo positivo en todo. Detrás de estas letras ✍️se esconden muchas lágrimas, mucha tristeza, pero
eso simplemente es parte de unas cuantas oraciones que lleva el libro de mi
vida …
Nada de estas líneas fuera posible sin el centro de mi vida: Dios. A
él le debo todo lo que soy. Es cliché, pero sin él no pudiera expresarme con la
libertad que lo hago. Está presente en TODOS los momentos de mi vida, le
entrego todo a él.
Mi paz y serenidad no son negociables . Por nada ni por nadie.
Reconozco que soy extrema con la higiene, pero súper extrema con mi tranquilidad.
Le doy gracias a mi Dios por todas sus enseñanzas, por decirme quien sí y quien
no puede entrar en mi vida. Por ser mi escudo que me protege, pero más que todo
por su palabra ser mi mayor arma.
Soy feliz; tengo juventud, salud, a mi Dios y a mi familia que no la
cambio por nada ni por nadie (me toco la mejor !)
Ver de lo no tan positivo, lo bueno. ❣️
Comentarios
Publicar un comentario